La primera cita
Por: Dalila M. Olmo López
Para placerespr.com
Las primeras citas son “una lotería”, pues pueden ser una experiencia que se queda marcada en la memoria con ternura o como un recuerdo que con ansias se desea borrar de nuestro disco duro. Es evidente que, si encontrar una pareja que te haga feliz en todo sentido fuese fácil, ese primer encuentro no fuese uno tan codiciado. Todos y todas buscamos algo distinto dentro de ese llamado “meet cute”, pues nos marcan nuestras ambiciones y expectativas en torno a una relación amorosa. No obstante, encima de lo mucho que se espera de ese inicio, no es simple escoger cuál actividad es la correcta sin conocer a la persona antes. Igualmente, puede resultar complicado pensar en una cita “ideal” que contribuya a la imagen que quieres proyectar ante esa compañía. Por esto, hicimos una encuesta para recopilar ideas sobre cuales serían posibles opciones de citas arquetipo.
La mayoría prefiere que la primera cita sea “relax” para decidir si quieren volver a ver a la persona. Suministrada.
A pesar de que se piensa que hay diversos intereses generacionales, que dependen de las experiencias vividas por cada cual, muchos expresaron su interés en tener encuentros similares, independientemente de su edad. Se encuestaron a personas desde los 22 hasta los 80, algunos(as) buscando por amor, otros(as) queriendo pasar un buen rato y pocos(as) recordando a sus queridos y los momentos que compartieron antes de despedirse de sus amadas parejas por causalidades inesperadas en la vida. Era notable que algunos(as) llevaban pensando en su cita ideal con anticipación y a otros(as) la pregunta los(as) tomó de sorpresa.
La mayoría expresó que es indispensable un escenario privado; aislados de la sociedad y todas sus distracciones para enfocarse en quien los(as) acompaña. Fueron pocos(as) los(as) que buscaban compartir con una muchedumbre en su cita.
En cuanto a actividades, para aquellos fanáticos de las aventuras, las más solicitadas fueron las playas y hacer actividades físicas e interactivas como escalar montañas. Dentro de estas opciones la mayor petición era la espontaneidad de parte de quien invita. Hay una continua búsqueda por la belleza y el detalle que conlleva el elemento sorpresa. Aquí hubo inclinación por los famosos “picnics”, al igual que deseo por las paradas imprevistas en la cita.
Eventos al aire libre y hasta de aventura son los preferidos de muchos entrevistados. Suministrada.
Evidentemente, la naturaleza toma un rol importante en lo que es considerado romántico. Para otros, con intereses distintos y con deseos de otro ambiente, lo que corresponde en una primera cita es ir a un restaurante con una vista hermosa, un lugar tranquilo y decorado con plantas que le brinden un aspecto intrigante al local y temas de los cuales platicar. En estos casos, muchos(as) de ellos(as) indicaron que la formalidad del lugar no es un aspecto importante.
Otros, aunque amantes del arte descartan el cine como punto de interés para una primera cita, ya que no es un espacio en donde se pueden conocer ni hablar. Estos(as) optaron por una visita a un museo en donde puedan tener conversaciones sobre lo que observan dentro de las piezas de arte, lo cual siempre varía. Nos dijeron, que según lo que cada cual aprecia dentro del arte, al interpretarlo, se pueden conocer mejor y entender sus personalidades y gustos.
Mesa para dos, sin que sea necesario la formalidad, es para muchos la cita ideal. Suministrada.
Aquellos con interés por la muchedumbre mencionaron como ideal un paseo por lugares donde puedan hacer “bar hopping” y bailar. Estas personas explicaron su interés de este tipo de escenario como un intento de ver a las personas en su forma más auténtica y observar cómo se manejan en ambientes sociales como individuos, cómo tratan a las personas y cómo se manifiestan. Como constante, establecieron que deseaban una variedad de locales que incluyesen a todo tipo de presupuesto para no incomodar a su compañía. Dentro de los lugares mencionados a estos fines están la calle Loiza, el Condado y la Placita.
Otro elemento, que percibimos consideran todavía más importante en la primera cita, es cómo se llevan y desarrollan las mismas. Algunas personas querían una cita corta, donde dentro del tiempo dado pudiesen observar y entender a la persona antes de decidir si tienen interés por continuar conociéndolo (la). Otros querían un pasadía, un evento que les permita entender la esencia de la persona. Lo que quedó claro es que todos(as) entendían como imprescindible que la cita no se podía llevar a cabo con prisa alguna.
En cuanto a lo que requiere cada cual para que haya una segunda cita con esa persona, los intereses son los mismos. La fluidez conversacional, el interés notable en saber más sobre él o ella, las risas orgánicas, los buenos modales y gustos comunes, parecen ser necesarios. Además, piensan que es indispensable que la persona sea educada y esté alerta de lo que está pasando en el país y la actualidad. No obstante, no hay espacio para la imposición o insistencia en sobrepasar la línea de comodidad de la persona, ni para falta de higiene o faltas de consideración en cuanto al trato personal.
A todos les mueven las ganas de vivir y evidentemente buscan con quién compartir, con quién reírse, con quien hablar sobre sus días y alguien que las o los escuche con oídos atentos. Incluso, independientemente de los gustos de cada cual, varias personas indicaron que la cita perfecta es una construcción social que no debe imponer presión en ese primer encuentro, “lo importante es que la persona aparezca”.
Soltero(a), complicado(a), comprometido(a) o casado(a) a todos y todas nos gusta que nos hagan sentir especial y queridos. Los y las invito a pensar y planificar en esta cita ideal o no ideal y que saquen a su persona de interés de paseo y que vivan lo lindo que es el compartir.
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