Cuido de Niños mientras trabajas
Por: Myra SánchezLos cambios socio-económicos, que mueven cada vez más mujeres a la fuerza trabajadora, han convertido en una necesidad imperiosa encontrar un lugar adecuado para el cuido de los niños. Los abuelos, que cada vez se retiran más tarde, llegado el momento, pueden representar ayuda temporal, no permanente. Además, el conocimiento de que la educación elemental, particularmente en las escuelas privadas, comienza con mayores demandas, ha provocado que muchos contemplen el “pre-escolar” y las “tutorías, con cuido extendido” como un ingrediente adicional a considerar.
Aunque hoy las familias son menos numerosas, el costo por el cuido y/o tutorías de los chicos es cada vez mayor, sobre todo en aquellos lugares que aparentan ser “los ideales” para dejarlos mientras laboramos. Además, a la hora de escoger, sin remedio, debemos considerar aquellos lugares que representen alternativas convenientes en torno a costo y localización.
Sorprendentemente, la cantidad de jóvenes y adultos desempleados ha provisto para que estén disponible para atender estas necesidades, y se convierten en una posibilidad costo efectiva que no había en el pasado y que describimos a continuación.
Las alternativas:
- Contratar una persona para atenderlos en el hogar – Esta es la alternativa ideal, y puede serlo desde los primeros meses del bebé, hasta que sea posible. Ofrece la ventaja de que esta persona puede ayudarte con uno o más chicos, tuyos o de alguna persona muy cercana y compatible, que alterne horario según necesidades y conveniencias de las partes. Contratar una persona para trabajar en tu hogar conlleva:
- Escoger muy bien, evaluando sus modales, actitudes y valores y asegurarte que estos sean compartidos con los de tu familia
- Conseguir referencias de experiencias previas en cuidado de niños y hacer el ejercicio de llamar a esas referencias sin temor a preguntar sus fortalezas y sus puntos débiles. Si posible, y de forma sensible y respetuosa, verifica su lugar de residencia para que conozcas el ambiente y las personas de su entorno.
- Solicitar Certificado de Buena Conducta, Salud y Seguro Social
- Tener una póliza del Fondo del Seguro del Estado que le cubra y mantener parámetros de seguridad para el bienestar de tus hijos.
- Si utilizara el carro para transportar niño(s) en algún momento, asegurarte tiene licencia de conducir y carro asegurado. Además, debes proveerle los asientos de seguridad necesarios para el vehículo y exigir su uso, tanto a esta persona como a tus hijos.
- Asegúrate de poner por escrito acuerdos en términos de responsabilidades vs. honorarios y horario de trabajo, así como lo aplicable en caso de posibles imprevistos.
- Mantén un canal de comunicación perfecto entre ambas partes y contactos en caso de emergencias.
- Asegúrate de que la persona cumpla con las normas establecidas en tu hogar, en torno a alimentación, higiene, modales, formas de disciplina y conducta en general y que entienda sin tu autorización, los niños no pueden salir de la casa ni hacer actividades diferentes a la rutina establecida.
- Asegúrate la persona conozca personas autorizadas para visitar o recoger los chicos y que las conozca en presencia tuya antes de cualquier salida bajo su responsabilidad.
- Asegúrate la persona disponga de conocimiento en primeros auxilios y de instrucciones precisas en caso de emergencias.
- Toma en cuenta las necesidades particulares de tus hijos y su capacidad para socializar/compartir con un nuevo cuidador, asegurándote de que la confianza mayor sea contigo, de forma que puedan comunicarte cualquier inquietud o anormalidad.
- Entiende este es un ser humano con necesidades al que debes tratar con respeto y consideración, sin excesos y que también debes tener alternativas en caso de que necesite ausentarse por motivos personales.
- Bebé a pre-escolar
- Cuido en el hogar por persona contratada o parientes (abuelos, tíos). Luego de la correspondiente evaluación, que incluya todo tipo de criterios para el bienestar del niño(a), esta debe ser la alternativa ideal, si posible hasta que esté entrenado para ir al baño.
- Centros pre-escolar – Hay muy buenos, la cuestión es “dar con ellos” y por el costo que podemos pagar, sobre todo si hay otros hermanos que atender. En este sentido, debemos evaluar la higiene, salubridad, alimentación, cantidad de maestros/asistentes por grupo, ambiente y currículo. De esta manera podemos estar seguros están bien atendidos y que pueden aprender lo necesario para la transición a escuela elemental. Debes investigar con tiempo si trabajan en días festivos y durante las vacaciones de verano, Navidad y Semana Santa y como combina su itinerario a estos efectos con el tuyo.
- Escuela elemental
- Cuido y Tutorías ofrecidos por la escuela o colegio al que asisten – Esta alternativa ofrece la tranquilidad de que los niños no tienen que moverse de lugar. Sin embargo, evalúa si realmente es costo-efectivo: por el servicio como tal, por la seguridad, por la cantidad de niños y la forma de agruparlos, y porque realmente adelanten algo de asignaciones. Debes tratar de que cuando los recojas el tiempo que pases con ellos sea para darse un buen baño, comer, repasar las libretas y tener alguna distracción familiar/relajada.
- Cuido y Tutorías separados de la escuela donde estudian – En este caso, si no eres quien los busca para transportarlos, conlleva un costo adicional, pero puede representar la tranquilidad de un horario más flexible y que los recojas con las asignaciones “bien hechas” y hasta alimentados.
En cualquier caso, la seguridad y el bienestar de tus hijos son tu responsabilidad y debes asegurarte el “cuido” tenga las herramientas necesarias que tu tengas que proveer.
No importa cuál sea nuestra capacidad económica para afrontar este gasto, sino que, como padres, entendamos que la experiencia de nuestros hijos, mientras estamos ausentes, debe ser positiva pues afecta su desarrollo emocional, intelectual y social.
Y, lo más importante, asegúrate de mantener una comunicación absoluta con tus hijos, para que sepas todo detalles de lo que ocurre en tu ausencia, tanto en la escuela, como en las horas en que están al cuidado de tutores.