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Blefaroplastia

Extirpar el exceso de piel de los párpados que se produce con el paso de los años, es un proceso cada vez más común. Este tipo de cirugía, llamada blefaroplastia, puede ser realizada de forma ambulatoria por un cirujano plástico o por un oftalmólogo especialista en cirugía de ojos. Aunque el procedimiento tiene como resultado una imagen rejuvenecida del área de los ojos, en ocasiones es recomendado médicamente para eliminar la flacidez y grasa que se acumulan alrededor del ojo, cuando ello produce limitación visual lateral. De hecho, hay planes médicos que pueden cubrir el costo parcial o total de esta cirugía si la misma es justificada como necesaria para reparar un problema visual.

La blefaroplastia puede ser recomendable, aunque no necesariamente cubierta por un seguro médico, cuando existen algunos de las siguientes circunstancias:

  • Exceso de piel en los párpados superiores que bloquee parcialmente la visión periférica.
  • Exceso de piel en los párpados inferiores
  • Bolsas o flacidez en párpados superiores y/o inferiores

Visual recuperación de la cirugía del párpado superior desde el día primero hasta el segundo mes post operatorio. Foto: suministrada (Dreamstime).

Como toda cirugía, la blefaroplastia conlleva riesgos que pueden incluir:

  • reacciones a la anestesia
  • coágulos sanguíneos
  • Problemas con los párpados, como dificultad para cerrar los ojos
  • cicatrices notables
  • lesión en los músculos del ojo
  • visión borrosa temporal o pérdida de visión permanente
  • cambios en color de la piel
  • necesitar cirugías adicionales

Cuando visites alguno de los especialistas médicos sugeridos, dependiendo de los motivos, será necesario que proveas información sobre tus antecedentes médicos, incluyendo, entre otros, cirugías, alergias, condiciones visuales o circulatorias y medicamentos que utilizas y las razones para ello. Aclaradas las preguntas que tengan paciente y especialista, y tras hacer varios exámenes especializados, el médico podrá confirmar si el procedimiento puede o no realizarse, si son justificables para efectos del seguro y los posibles resultados que se podrían lograr.

En el caso de que decidan seguir adelante con la cirugía, el medico advertirá sobre la preparación en las semanas previas a la misma. Esto incluye, entre otras posibles, no consumir medicamentos que puedan provocar aumento de sangrado (o alternativas a los que tomas) y no fumar, algo que puede afectar la cicatrización. El día de la cirugía, con toda probabilidad se requiera anestesia local en los párpados y sedación por vía intravenosa, para ayudar al paciente a relajarse.

Mediante varios exámenes especializados, tanto visuales como físicos, se podrá determinar si es posible operar y/o expectativas de resultados. Foto: suministrada (Pixabay)

El especialista procederá con la cirugía, según planificada y explicada y, si no hay ningún otro procedimiento adicional requerido ni alguna situación imprevista, la blefaroplastia suele terminar antes de 1 hora. Luego, el paciente debe pasar por un periodo de observación para verificar que no surjan complicaciones. El paciente podrá regresar al hogar luego de algunas horas y de haber sido instruido en torno a los cuidados que deberá seguir tras la operación. Además, el paciente será advertido sobre aquellas reacciones que pueden surgir posteriormente que pueden considerarse normales y remedios para atenderlas, así como sobre las que pueden ser alarmantes y requerir atención médica inmediata. También, debe recibir instrucciones sobre lo que puede o no puede hacer en temas que incluyen el cuidado del área visual y sobre esfuerzos físicos que puedan impactar la recuperación. Serán necesarias otras visitas al especialista para observar resultados y quitar los puntos. Por lo general, la hinchazón posterior a la cirugía se reduce en un término de dos semanas y sus resultados suelen ser duraderos, pero hay casos en que los párpados pueden volver a caerse, a parte de otras complicaciones antes descritas.

La mayoría de los pacientes que se someten a una blefaroplastia consiguen los resultados deseados, pero como se ha mencionado en este reportaje, es importante acudir al especialista correcto, ponderar todo detalle para mitigar la posibilidad de riesgos y seguir los cuidados requeridos antes y después de la cirugía.

Nota: Para este reportaje fue utilizado como referencia el siguiente enlace: https://www.mayoclinic.org/es/tests-procedures/blepharoplasty/about/pac-20385174


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