El Flamenco Español
Por: Ivelisse Agostini
Entre la infinidad de elementos culturales que distinguen a España, el Flamenco es una de las manifestaciones artísticas mas reconocidas internacionalmente. Tan real es esta afirmación que, en el 2010, el flamenco fue declarado “Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad” por la UNESCO.
Hablamos de un arte que de forma sencilla puede atribuirse a la comunidad de Andalucía, en el sur de España, pero cuyos orígenes son mas complejos. Y, es que se dice que sus raíces tienen influencia del gitano de la India que anduvo errante por toda Europa y que encontró en el clima de Andalucía, entre otros lugares, un lugar perfecto para establecerse, en tiempos en que la región estaba bajo el dominio de los moros (musulmanes). Se dice que son estas dos culturas, entre otras tantas que habitaron el sur de España, las que mayor influencia han tenido en el Flamenco porque tuvieron que “convivir”, tras la conquista de la región por parte de los Reyes Católicos. De hecho, el Flamenco comenzó como un arte solamente cantado, “el cante”, con canciones populares con expresiones liricas, que narraban la angustia de la persecución de gitanos, árabes y judíos, incluyendo temas románticos, cotidianos o heroicos.
El cante, que luego evoluciona con variantes, se distingue por utilizar varias notas en una misma silaba (“melismas”), algo que depende de la capacidad vocal del intérprete y de aprender mediante práctica. Asimismo, la forma en que se utiliza la altura y frecuencia de sonidos vocales (vibratos) es otra característica que distingue al cante flamenco. En sus comienzos, el cantaor, solo utilizaba su voz acompañada de las palmas de sus manos, pero con el tiempo se integra el baile gitano con movimientos que recordaban sus orígenes de la India. Siempre comenzaban cantando y aplaudiendo para luego incorporar el baile, para “interpretar” con movimientos, la pasión detrás del sentimiento del cantaor.
La guitarra se fusiona con el “cante” en el siglo XIX (de hecho, con el tiempo se crea la guitarra flamenca, que armoniza mejor con los sonidos vocales) y, posteriormente se unen las castañuelas. Ya entrado el siglo XX se incorpora el sonido del “cajón” peruano, hasta lograr la maravillosa música que, junto al sonido de los tacones de los bailaores y las palmas de las manos del cantaor, logran la armonía perfecta que puede disfrutarse en un espectáculo flamenco.
No podemos dejar de mencionar que entre las variantes del “cante” flamenco existe la más intensa y emotiva, el “cante jondo” la manifestación mas profunda del flamenco, que hicieron famosos intérpretes españoles como “camarón de la Isla” (el gaditano José Monje Cruz), Lola Flores y Enrique Morente.
Además, hemos podido disfrutar de una vertiente del flamenco llamada “rumba flamenca” con figuras destacadas como lo fue Peret, los Amaya, los Del Rio y Estopa y unas favoritas de siempre como Rocío y Lolita Flores y la Niña Pastori, por mencionar algunos nombres que
Confiamos haber podido “contarles”, a nuestra forma y estilo, lo más relevante sobre el flamenco que, si nos descuidamos, también se relaciona con la variedad de influencias que tiene nuestra música de “trova”, sobre cuya historia hablaremos en un futuro reportaje. Mientras, el Flamenco sigue moviéndose por el mundo para que sin dudarlo, sean muchos los que acuden a un “tablao” a disfrutarlo.
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