Conoce sobre “Love Bombing”
Por: Myra Sánchez
Resulta muy fácil, hasta para quien no sepa mucho inglés, deducir que el término “love bombíng” se traduzca en “bombardeo de amor”. Sin embargo, el término se refiere a un proceso planificado con fines específicos, en el cual el interesado desarrolla un sistemático bombardeo de halagos, expresiones de amor, comprensión y aceptación para conseguir convencer al impactado de que todo un escenario es ideal, que “baje la guardia” y así poder manipularlo.
Utilizado por legendarias sectas en los 70’s para atraer seguidores, en algún momento fue una herramienta positiva entre algunos padres con hijos pequeños. Esta alegada “terapia infantil” consistía en darle a los niños la oportunidad de tener el control en algunas tareas o situaciones selectivas, para hacerlos sentir seguros y reforzar su autoestima, pero especialmente, hacerlos sentir muy amados en diferentes circunstancias. La técnica, bien utilizada, logra que los niños se sientan valorados y seguros de sí mismos, sobretodo, si parte de un amor genuino. De hecho, supe de su existencia, mientras navegaba en busca de temas sobre la importancia del amor en la etapa temprana de la crianza.
Alguien que conociera sobre los buenos resultados del “love bombing” debe haberlo transportado a la cotidianidad de la vida y, por ende, su uso es frecuente, pero lamentablemente, en muchos casos, dañino por parte de personas inescrupulosas. Por dar ejemplos, estoy segura de que todos hemos vivido situaciones entre relaciones de personas con las que compartimos en sitios como el salón de clases, la oficina o entre profesionales, donde observas que algunos son elogiados por otros que buscan conseguir un objetivo y luego de conseguirlo, son desechados y hasta traicionados. Y, es que existen infinidad de adaptaciones que pueden relacionarse con el “love bombing”, cuando es la manipulación la que protagoniza juegos con el afecto y/o el reconocimiento que necesitan algunas personas, pero nunca se nos hubiera ocurrido este nombre…
De hecho, por mucho que hayamos visto muestras de manipulación, es difícil creer que el “love bombing” sea utilizado para conquistar o seducir a una persona para luego descartarla, especialmente porque el impactado, por lo general, es una persona vulnerable, que está necesitada de afecto. Sin duda, se trata de un acto egoísta del que hay que protegerse y de alguna manera estar alerta.
Como en este momento las redes sociales “hablan” y “cuentan” tantas cosas sobre cada persona, son muchas más las posibilidades de que existan manipuladores al asecho de pareja, a los que se les haga muy fácil identificar de qué forma impresionarles. Asimismo, están expuestos quienes participan en los “dating sites”, cuando lo último que alguien puede necesitar es caer en manos de uno de estos manipuladores que pueden causar inimaginables sufrimientos.
Por lo anterior, nos dimos a la tarea de investigar sobre cómo operan los “manipuladores de amor” y pudimos encontrar que los que han profundizado sobre el tema coinciden en que la mayoría de los detalles a continuación son frecuentes en un proceso de “love bombing” de quien busca pareja o alguna meta particular con ella:
- Buscan la forma de acercarse a ti hasta que lo consiguen
- Ganan tu confianza mostrando afinidad y empatía para lograr tu amistad
- Buscan la forma de saber todo lo que puedan sobre ti, lo cual logran con tu confianza y la de tu círculo cercano
- Parecen dedicarte su tiempo por entero, pero es que por lo general, son personas inadaptadas, con un círculo social muy cerrado.
- Cuentan poco o nada de sí mismos para evitar darte algún control sobre ellos, pero en contadas ocasiones comentan sobre sucesos tristes o carencias para despertar tu empatía
- Te demuestran comprensión y apoyo, hasta por lo que te criticas de ti mismo, en busca de convertirse en tus ojos y en tus oídos
- Te halagan constantemente
- Tienen contigo detalles que saben de antemano van a impresionarte
- Te llevan a un escenario donde se sienten seguros y ¡te seducen!
- Cuando el interesado va en busca de objetivos que requieren mayores compromisos, apresuran dar pasos determinantes como lograr formalizar la relación, convivencia; matrimonio y hasta tener hijos. Todo depende de su proyecto y cuán fácil les resulte la pareja seleccionada.
- Cuando se sienten seguros de “que ya caíste en el gancho” de repente dejas de ser la figura central y comienzan a imponer sus deseos y gustos.
- Si no aceptas sus reclamos, comienzan a tratar de recuperar el control de diferentes formas, haciéndote sentir que son víctimas, que la razón les asiste y que eres quien siempre se equivoca. En momentos de crisis, amenazan con que te van a dejar. O sea, comienza el chantaje emocional.
- Aquellos cuyo propósito es lograr metas que se logran a corto plazo y se dedican a relaciones cortas que repiten una y otra vez con algún éxito, por lo general terminan la relación en esta etapa.
- Para los que buscan compromisos, cuando no les está siendo fácil controlarte, buscan la forma de separarte de tu círculo cercano y de las actividades que prefieres o dejan de compartir esa parte de tu vida, algo que NO es normal, pero muchos terminan cediendo porque se han convertido en codependientes.
- Mientras más vulnerable y sediento de amor esté la víctima, más va a ceder, pero cada vez se sentirá más infeliz y deseará recuperar el control de su vida.
- El manipulador termina mostrando su verdadero perfil y salen a la luz las diferencias, los reclamos, la infelicidad de la víctima y/o la de ambos.
- El egoísmo de uno y la vulnerabilidad del otro llevan la relación al fracaso y en algunos casos, con graves consecuencias.
El escenario puede contar con infinidad de variables, incluso que se torne en una historia positiva, pero hay siempre un origen que propende al fracaso: el engaño. Lo usual es que, dependiendo de quién termine la relación, la víctima que se hizo ilusiones por lo que comenzó con un “love bombing” siempre quedará lastimada, aunque en realidad debe sentirse liberada. En cuanto al manipulador, siempre quedará resentido porque su víctima le arruinó sus planes, pero de alguna manera satisfecho, porque logró parte de lo que fueren sus objetivos. Y, esos objetivos pueden ser diversos, incluyendo beneficios económicos.
Sobre este tema, el portal de nuestros amigos de psicoactiva.com, advierte que los más vulnerables al “love bombing” son aquellas personas que no sintieron “apego seguro” durante su infancia y creen que necesitan ganarse el afecto de los demás, algo que los manipuladores perciben muy fácil. Al respecto, establecen que una señal clara de “love bombing” es cuando además del bombardeo de amor te demuestran el deseo de apresurar los próximos pasos y expresan: “Si crees que una relación está surgiendo demasiado rápido y con un cariño excesivo e inesperado, seguramente sea un Love Bombing”. Detectarlo, no solamente es importante para ir con mucho cuidado y evitar involucrarte emocionalmente, sino para identificar si tienes algún problema por necesidad de apego. Si ya eres parte de una relación de pareja tóxica, debes buscar ayuda psicológica antes que sea tarde. De hecho, te recomendamos hagas el “test” sobre este tema mediante el enlace https://www.psicoactiva.com/test/test-de-relacion-toxica.htm De otra parte, en este mismo portal sugieren ver el documental de Netflix ‘The Tinder Swindler’ donde se muestra un ejemplo de cómo alguien implementa “love bombing” de pareja, con unos fines particulares.
Al final, como dice el dicho “sálvese el que pueda”; aprenda a proteger su intimidad y a no confiar demasiado en los halagos, ni en primeras impresiones. Aunque hay personas que son capaces de bombardearte con amor de forma sincera y desinteresada, debemos ser cuidadosos, especialmente si observas que todo el enfoque de la relación que comienzas es sobre ti y lo tuyo, mientras la otra persona nunca revela nada de sí mismo. El tiempo es el gran sabio que, a veces tarda, pero saca a la luz la verdad. Si estás insegura(o), ve con calma, alerta y sin prisa…
NOTA: Este reportaje es producto de investigación en diferentes portales luego de conocer sobre el uso de esta herramienta descrito en el libro The Power of Love Bombing: Reboot your Child’s Emotional Well-Being, escrito por el psicólogo Oliver James y sobre cuya extensión hablaremos en un próximo reportaje.
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