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Psicología del Espejo

Por: Myra Sánchez

La forma en que te ves a ti mismo(a) o tu auto-imagen y cómo piensas que te ven los demás, tiene mucho que ver con tu auto-estima. Lamentablemente, muchas veces nos enfocamos en lo que a nuestro físico se refiere y son muchos los que se miran en un espejo para solo criticarse, basado en lo que el mundo externo o las tendencias de la moda marcan que es mejor. De ahí que surjan las insatisfacciones en torno a las imperfecciones en el rostro, la forma y el peso del cuerpo; el cabello y la estatura. Tan real es esto, que en casos severos provoca desórdenes alimenticios y hasta que algunos decidan aislarse, pues se sienten incapaces de fluir satisfactoriamente entre los demás.

No todo lo que ves es hermoso, a veces es físico o parte de tu actitud y tienes que trabajar con ello. Suministrada.

Hay infinidad de ocasiones en que terapeutas de la conducta hacen uso del espejo de cuerpo completo para solicitarle al paciente que se mire y comience a describir lo que ve en la imagen de ‘éste’. A veces, ésta resulta ser la única manera en que el individuo es capaz de “dejar salir’ algo que le tortura y le impide ser feliz ‘con su equipaje’.

En muchos casos, de hecho en casi todos, siempre es posible mejorar la imagen física. Basta con descubrir cuáles son las cosas que más te molestan y recurrir a algún tipo de ‘make-over’. En algunos casos, se requiere de apelar a la fuerza de voluntad para hacer dieta o ejercicios y, mientras tanto, es indispensable incorporar herramientas adecuadas en tu arreglo personal para que comiences a sentirte mejor. Sin embargo, la herramienta más efectiva es mirarte en el espejo y ‘con la misma mirada’ identificar aquellas cosas que te gustan de ti mismo(a). Mejor aún, ir a los rasgos de tu personalidad que sabes son percibidos de forma más agradable como lo es ser cariñoso, servicial, simpático, culto, buen conversador, entre otros. Reconocer tus cualidades siempre va a ser positivo para que te vayas liberando de la mala auto-imagen que te has creado y que a veces no tiene nada que ver con lo que las personas “ven” en ti cuando te acercas.

Si eres de los que se ha dado cuenta de que se siente insatisfecho(a) con su auto-imagen, además de encontrar los puntos positivos que le devuelve el espejo y reconocer los que son parte de su personalidad, debes tratar de identificar una persona cercana, confiable y positiva, a la que puedas preguntarle las cosas buenas que ve en ti. ¡Te prometemos que te vas a sorprender! Sabemos de muchos casos en que los detalles que una persona no valoraba resultaron ser la envidia de otros…

Otra gran ayuda que puede darte el espejo es para mejorar la proyección de tu personalidad. Hay casos en que la gente considera una persona como aburrida o como si ‘fuera un haba sin sal” porque no expresa ningún entusiasmo aunque domine un tema interesante. En otros casos, hay personas que se perciben como agresivas por el acento o el tono que utilizan al hablar. En cualquier caso, si descubres algo que te inquieta en torno a la percepción que otros tienen de ti, aunque no aceptes la crítica, te recomendamos que te pares frente a un espejo e imites justo la forma en que te expresas. Volvemos a la sorpresa ¡Tal vez es la única forma en que aceptes que algunos puedan tener razón en torno a esa opinión! En adelante, podrás practicar, frente a tu nuevo amigo, el espejo, cómo debes modular tu voz o afinar tus expresiones para una mejor proyección y de repente, te conviertas en “favorite person” de muchos.

Si ya comenzaste el proceso transformador, considera estos sabios consejos:

Detener cualquier pensamiento ‘saboteador’ que te recuerde aspectos que no te gustan y sustitúyelo por otros sobre lo que sí te gusta.
Reconoce cualquier cambio o progreso positivo que vayas logrando y esmérate en resaltarlo.
Incentiva y ocupa tu tiempo en actividades donde las cosas a las que das valor te hagan lucir.
Si lo que intentas es mejorar tu proyección, practica cual si conversaras contigo mismo(a) frente al espejo y si de casualidad tienes cerca uno en momentos en que sabes que has estado muy ‘aplatanado(a)’ o demasiado excitado(a), corre y párate frente a éste para que te veas justo como te han visto los demás.

Al final, te recordamos que todos llegamos a este mundo con talentos y propósitos que tienen valor para nosotros y para el ambiente en el que nos desenvolvemos. Esmerarte en llevar una vida saludable contribuirá para que seas feliz y con esto hacer feliz a otros. El concepto de la belleza física es subjetivo y temporal, no así lo que llevamos en nuestro interior. Es ello a lo que más importancia debemos dar y lo que más debemos cuidar.